En pleno año 2014, en la era de la información y frente a la gran depresión social y cultural que enfrenta la generación millenials (por lo menos aquí en México, o mejor dicho, por lo menos hasta donde me llega la vista) no podemos permitirnos ser tan vanos y tan superfluos cómo para suicidarnospor uno de esos motivos tan populares como: "Mi novia me dejo", "Mi [pariente/amigo/pareja] se murió", "No pase el examen de admisión de la [Nombre de Universidad]". No, debemos tener más respeto por nosotros mismos y debemos escoger razones un poco mas complejas y, a falta de una mejor palabra, mamonas para suicidarnos. Después de todo, y suponiendo que mis lectores tienen más de 20 años (preferentemente más de 25), como que ya estamos grandes para suicidarnos por mamadas ¿o no?.
En fin, si aún no haz encontrado una buena razón para suicidarte, permiteme facilitarte la tarea. Te presento aquí tres razones CONVINCENTES, INTELIGENTES, pero sobre todo INCUESTIONABLES para justificar tu suicidio.
1.-La vida no tiene significado.
Para este punto, espero (anhelo, deseo, necesito) que seas ateo. ¿Por qué? Porque va a ser más difícil (o fácil, dependiendo de que tan pendejo seas. Y no, ser pendejo tampoco es una buena razón para suicidarte) convencerte de suicidarte.
Muy bien, como ya mencione antes, partiendo del supuesto que tú, lector, eres ateo...
Para este momento probablemente ya llegaste a la inequívoca conclusión de que la vida (consciente e inconsciente) como tal carece de propósito o significado.
¿Por qué? ¿Para qué? ¿De quien fue la puta idea de que el planeta Tierra fuera habitable y en consecuencia de que terminara habitado por... cosas-animales-plantas-algo? Porque "YOLO", para "no'mas", de nadie; esas son tus respuestas, claro, nada satisfactorias pero reales.Así es, por más que te esfuerces, por más que batalles, tus esfuerzos son fútiles. Finalmente, llegaste a este mundo para pasar por él sin pena ni gloria y luego irte como llegaste, completamente en el anonimato. Y si bien, para alguna personas esto es en realidad motivante (y lo entiendo perfectamente porque no hay mejor ambiente para la libertad absoluta, no confundir con el libertinaje, que el anonimato), lo que realidad quiero dar a entender es que la decisión de terminar con tu vida es igual de trascendente que terminar con tu novio/novia de la prepa, o #TeamEdward o #TeamJacob, o de que color te vas a vestir hoy. Tú no importas. Nadie importa. Finalmente, NADA importa.
2.-Tu vida no es en absoluto tuya.
Desde el sedentarismo, una de las cosas que más ha definido la calidad de vida de los humanos son las posesiones. Pero, en cuanto entra a escena la filosofía y todos estos estudiosos que se dedicaron a analizar la naturaleza filosófica de las posesiones del hombre, nos dimos cuenta que tal concepto es ridículo y arbitrario, nadie posee nada, pues no hay una sola cosa que no se pueda quitar. Y aquí es cuando tu argumentas: "no, mi libertad es mía, mi vida es mía porque aunque me pueden esclavizar o me puedan amenazar de muerte, siempre puedo decir que no, siempre puedo decidir y siempre puedo decidir que hacer con mi vida" ¿Eso ibas a decir, no? Seguramente era algo parecido. Pero no.
Por donde lo mires, tanto tus decisiones como tu vida misma no te pertenecen. Cual filosofía marxista, tu vida le pertenece al colectivo ¿no me crees? Se honesto contigo mismo y piensa: "¿por qué no huyo de aquí? ¿por qué no me escapo para buscar mi felicidad donde sea que esta esté? Aquí, ahora ¿por qué no?" Seguramente vas a dar mil razones, y una de ellas (tal vez mas) involucran a tus seres queridos. "No le podría hacer eso a mi mamá", "no le podría hacer eso a mi hermana/hermano", "no le podría hacer eso a mi mejor amigo/amiga", "no le podría hacer eso a mi pareja", yo sé que por lo menos una de esas te paso por la mente. ¿Ves? Ni tu vida es tuya.
¿Qué clase de porquería de mundo es este en el que un hombre no puede ni jactarse de poseer ni su propia vida? ¿Quién querría vivir en un mundo así?
3.-Somos hambrientos e insaciables por naturaleza*
Lamenteblemente fuimos educados, desde infantes, para alcanzar el éxito y hasta ahí todo va bien. El problema empieza cuando no se nos enseña que es este famoso éxito, con la esperanza de que descubramos por nosotros mismo nuestra propia definición y así dedicar nuestra vida a esta búsqueda. Luego llega la madre y mentora más grande del mundo capitalizado, la televisión, o mejor dicho, la mercadotecnia ha redefinir este concepto tan importante.
Así es, sin importar que tan único o hipster te sientas, que tan "fuera del sistema" te consideres, gran parte de quien eres se determino por la televisión o cualquier medio de comunicación masiva en la que la mercadotecnia haya metido las manos. Pero... ¿Qué quiere la mercadotecnia? ¿Un mejor mundo? ¿Un mundo en el que todos seamos felices? No. La mercadotecnia quiere vender y no hay mejores compradores que los infelices e insatisfechos. Se nos enseño que el éxito es directamente proporcional al dinero y/o una de sus múltiples presentaciones: Los niños quieren juguetes ¿Cuántos? Todos los que sean posibles. Los jóvenes quieren tener sexo y para eso necesitan impresionar, verse bien, oler bien, ligar bien, "estar en la onda" (comprar cosas, ropa, perfumes, bebidas, regalos, gadgets, etc). Los adultos quieren dinero, buenos ingresos, autos, cenas caras y demás. Se nos presentaron estándares de éxito inalcanzables. Muy en el fondo todos queremos ser rockstars, o titanes empresariales o alguna de las varias formas de éxito en las que el dinero juega un papel de suma importancia, pero la tremenda mayoría de nosotros sencillamente no puede llegar a ser así. Repito, se nos inculcaron metas inalcanzables, se nos preparó para idealizar una felicidad ridiculamente imposible.Fuiste educado para querer siempre más. Fuiste educado para ser infeliz.
Finalmente, como conclusión, la naturaleza misma de la condición humana es sumamente depresiva. Si le prestas la suficiente atención al mundo que te rodea y le das suficiente tiempo para analizarla a detalle te darás cuenta de que el suicidio no es, en absoluto, una decisión reprochable, por el contrario, es un la única decisión inteligente.
*Agradecimientos especiales a @illegnax por acompañarme en mis desvelos bloggeros y por su incalculable ayuda creativa



